Tendencia veraniega: Maquillaje "nude"

Por: Verónica Palomo » 12/04/2010 3 Comentarios El efecto cara lavada se sigue llevando. El maquillaje que no parece maquillaje arrasará este verano, así que si todavía no sabes cómo “no pintarte”, toma nota de estos consejos. Ojos, tez, mejillas, labios… Todos maquillados, pero de la forma más natural posible. Es lo que se conoce como el efecto “nude”, o lo que es lo mismo: la técnica capaz de maquillar tu rostro y que parezca que llevas la cara lavada. La moda no es nueva, pero este verano se reinventa y las marcas de cosmética sacan al mercado nuevos tonos; más subidos y luminosos. OJOS ¿Quién ha dicho que sólo puedes ahumarte los ojos en negro o en gris? Los tonos pastel no sólo son apropiados para los ojos “fumé”, sino que este verano se vuelven más que recomendables. Elige los rosa, los beige, los crema, vainilla, los violeta, los perla… La técnica es la misma que utilizas con los colores más oscuros, pero la ventaja es que ahora si te equivocas sobre estos tonos es siempre más fácil rectificar y corregir. Aplica el tono más claro por todo el párpado superior, cubriendo desde las pestañas hasta las cejas. Después, aplica un tono más oscuro a lo largo de la base de las pestañas, marcando una línea recorriendo el párpado, desde el lagrimal hasta el extremo del ojo. Para terminar, difumina siempre hacia arriba hasta que la sombra alcance la parte externa de las cejas. LA BOCA Natural no significa exceso de brillo. Hay que intentar que nuestros labios sean deseables sin parecer que acabamos de terminar de comer un chorizo grasiento. La idea es que nuestra boca provoque, que parezca una nube de golosina, algodón de azúcar… algo deseable. Por ello hay que recurrir al rosa, en todas sus tonalidades, y saberlo difuminar. Siempre es mejor marca la boca con un perfilador lo más parecido posible a nuestro tono de piel y aplicar un poquito de gloss en el centro de nuestros labios. MEJILLAS Al contrario de lo que puedas pensar, unas mejillas subidas de tono pueden aportarte un toque de frescura y juventud. Tu cara parecerá más saludable, más despierta y natural. Dejar toda la cara con un maquillaje uniforme, lejos de naturalidad, te aportará años y un look nada favorecedor. La idea puede que funcione en la pasarela, pero en la vida real el colorete tiene siempre la última palabra. ¿Qué color elegir? Siempre acertarás con el rosa palo, los marrones o rojizos. Con cualquiera de ellos, aplicados sobre el pómulo, triunfarás. Bastará un toquecito de blush para dar un aire fresco a tu rostro, pero recuerda que si buscas algo más, como alisar facciones, tienes que currártelo un poquito más frente al espejo. Si, por ejemplo, quieres alargar tu cara porque la tienes redondita, debes aplicar el colorete desde el centro de la mejilla hacia fuera y tirando hacia arriba, llegando casi hasta la sien. Si por el contrario quieres redondear, siempre debes aplicar el blush en horizontal, del pómulo hacia la oreja.